¿En qué pensáis si os digo mantón de manila?
No se si estaréis de acuerdo pero a mi me trasmite el calor del sol, luz, color, gentío, olor a azahar… En este post voy a hablar de sus orígenes, su cambio con en el tiempo y como no, de lo que nació de él, el mantoncillo.
Su origen viene del oriente chino, en el cual su diseño estaba compuesto por dibujos de pájaros y dragones, donde aún no tenía flecos. Como consecuencia de las rutas comerciales, existente en la época imperial, el mantón llega a las colonias españolas donde se le incorpora los flecos. Es en la capital de Filipinas (Manila) donde acoge el nombre de mantón de manila , cosa que es curiosa ya que allí nunca se llegó a fabricar. En el S. XVIII viajó de las colonias españolas hasta España, donde las clases más pudientes lo acogieron como la prenda de moda. Durante esta época sufrió muchos cambios, tanto en tamaño como es sus dibujos.
En el S. XIX se popularizó para proteger los cuerpos de las mujeres trabajadoras en las horas de frió. Si sois de Sevilla seguro que más de una habréis escuchado a vuestras abuela decir que «era todo un espectáculo ver a las cigarreras entrar en la fábrica de tabaco con sus mantones». Se cuenta de ellas que utilizaban la seda en la que venía envuelto el tabaco para bordar sus mantones. Sus diseños de origen chino cambiaron totalmente por rosas y claveles.


Siglos después esta prenda siguió cambiando para que naciera el mantoncillo, para mí pieza básica de nuestra moda flamenca. Con el nacimiento del mantoncillo no quiere decir que muera el mantón, yo creo que en estos años esta volviendo a crecer su uso y fabricación artesanal. Hay bastantes talleres donde te enseñan tanto a fabricar sus bordados como sus flecos.
En casa de Rosser desde que mamá ha aprendido esta nueva artesanía, nos faltan días en la feria para estrenar mantones, mantoncillos y todo lo que lleve flecos. No es ningún secreto para mis seguidoras, que se convierte en mis pies y mis mano cada vez que la necesito por eso… ¡Bueno mejor os lo cuento al final!
¿Sabéis que el traje de flamenca es el traje regional que más ha cambiado en la historia? Todos los años en las pasarelas vemos tejidos, formas y colores diferente. Pero al igual pasa con todo lo que le rodea: complementos, flores, mantones o mantoncillos. Hay una nueva tendencia en mantones que es utilizar tejidos sin bordados con brocados en terciopelo o llamativos estampados, la verdad es que es algo diferente y con un resultado bastante bonito. Os muestro uno hecho por mi madre a ver que os parece.
Mantoncillos
Como ya os he dicho es una pieza que también va cambiando con el paso del tiempo. Hemos pasado de nuestros mantocillos lisos, de un solo color y de seda, a jugar con miles de colores y tejidos. Los de nuestra infancia empezaron a desaparecer para darle paso a los de plumeti, creo que no había ni una sola tienda de flamenca en la que no tuvieran este tipo de mantoncillos. Aunque estos siguen estando en activo, le pisan los talones miles de estampados y tejidos.
Este año está permitido todo en cuanto a mantoncillos, desde los más tradicionales a los más étnico, eso sí, no vayamos a abusar y nos lo pongamos con un traje de flamenca que ya el tejido hable por si solo.
Sobre las formas de ponerlos tenemos hasta que nos de la imaginación. Para mi la más elegante para acudir al real, es la de ponerlo en el contorno del escote. Para romerías la forma clásica de abrocharlo es con un alfiler a la altura del abdomen o cruzandolo a la altura del pecho, agarrándolo con alfiler a los lados del abdomen. Pero como todo es cuestión de gustos.
Como ya os adelante antes tenemos algo que contaros, ¡La familia Rosser sigue creciendo! Este año incorporaremos a nuestras piezas de flamencas los mantoncillos. Ya que mamá se ha convertido en toda una experta y en mi profesora. Tráenos la tela que quieras y nosotros te hacemos el mantoncillo con flecos totalmente artesanales, también tendremos algunos hecho pero serán solo unas unidades por ahora. No olvides que al ser artesanales, como todas nuestras piezas necesita su tiempo de elaboración, así que si estas interesada ponte en contacto cuanto antes con nosotros. ¡Quién dijo que los mantoncillos no podían ser piezas únicas!